Revelaron un dato que pone en jaque a la sanidad pública española: 2023 fue un año con muchas denuncias y negligencias
Si cada país usara más el bendito sentido común, podríamos estar mejor en los puntos más importantes como sociedad. Si la vida de los seres humanos es el valor más preciado que tenemos, mucho más que cualquier mercado económico, y si esa vida se conserva con salud, entonces la sanidad pública debería ser una prioridad en cualquier Estado que tenga representantes honestos. Pero, evidentemente, no funciona así. En España, más allá de elogios esporádicos y del agotador trabajo de la mayoría de los profesionales, la salud no atraviesa un buen presente.
De hecho, existe un dato que pone en jaque al sistema sanitario español. En 2023, 602 personas fallecieron en España por negligencias médicas. Sí, 602 seres humanos. La cifra, brindada por el Defensor del Paciente, es altísima. El mismo organismo informa además que se han registrado durante el año 12.071 casos de presuntas negligencias médico-sanitarias. De ese total, 602 terminaron en muerte. ¿Qué había sucedido en 2022 para comparar estas estadísticas? Se habían denunciado 1.540 negligencias y hubo 97 fallecimientos menos. La diferencia es abismal.
El desglose de las negligencias, una estadística que asusta en España
El principal motivo que se denuncia en España es el error en el diagnóstico y, en consecuencia, la pérdida de oportunidad terapéutica. Pero, por supuesto, las quejas y reclamaciones se expanden por todos los ámbitos. Por ejemplo, hubo 286 denuncias por casos que se sometieron a una cirugía plástica con resultado negativo.
Otro caso que llama la atención es el de los bebés que nacen con alguna discapacidad. Las denuncias se producen por partos llevados a cabo de manera inadecuada. Además, son varias las quejas contra los ginecólogos que no informan a los padres sobre malformaciones del feto. Madrid es la comunidad autónoma con más denuncias por negligencia. En total, acumuló 3.118 casos. Le sigue Andalucía con 2.289 casos. Después aparece Cataluña con 1.406 casos. En el cuarto puesto, la Comunidad Valenciana con 846 casos. En el quinto lugar, Castilla y León con 714 casos. Sexto figura Galicia con 651 casos. Más atrás aparece Castilla-La Mancha con 638 casos, el País Vasco con 410 casos, Murcia con 403 casos y, por último, Aragón con 331 casos.
Otro de los ya recurrentes inconvenientes de la sanidad pública española se encuentra en las eternas listas de espera, punto que sobresale al momento de las reclamaciones de los pacientes. Se demoran los diagnósticos, se demoran los tratamientos y empeora la salud. Todo forma parte de la misma cadena de gravedad.