El PSOE de Gómez Besteiro y la izquierda caen con estrépito en las elecciones gallegas: te contamos los motivos
Alfonso Rueda ha arrasado de la forma más inesperada posible. El candidato del Partido Popular se presentaba a sus primeras elecciones a la Xunta de Galicia. Era el presidente en el parlamento, pero tras el adiós de Alberto Núñez Feijóo y su salto al ámbito nacional, Rueda se encargó de liderar la comunidad del noroeste de España. Lo cierto es que había muchas dudas sobre su posible futuro mandato, pero la realidad ha sido muy positiva para un Rueda absolutamente orgulloso.
No ha sido una campaña precisamente sencilla para Alfonso Rueda. Los rumores de la posible amnistía tras un acuerdo entre Feijóo y Puigdemont se postulaban como su principal amenaza. Muchos creían que podía cambiar la dinámica de esa mayoría absoluta, la cual se ha instalado en Galicia en los últimos 15 años en favor del Partido Popular. Los populares no han tenido piedad de sus rivales, en especial los de izquierdas a excepción del BNG de Ana Pontón. Tanto PSOE como Sumar y Podemos no han aparecido en las elecciones y te vamos a contar los motivos de ese cambio tan dramático para la izquierda.
Un auténtico drama para el PSOE y la izquierda en las elecciones gallegas
Han pasado solo unas horas desde que los gallegos acudiesen a las urnas y se diese a conocer los resultados electorales. La realidad ha sido clara: el Partido Popular ha ganado de una forma apabullante al bloque de izquierdas. Solo se ha salvado en ese sentido el BNG. El partido nacionalista se ha consolidado como la segunda fuerza más votada en las elecciones gallegas.
El bombazo, para mal, ha llegado para los partidos de izquierdas. PSOE, Sumar y Podemos han visto caer sus previsiones hasta el suelo. Los socialistas han perdido cinco escaños, mientras que los otros dos partidos no tienen siquiera representación política en el parlamento de Galicia. Muchos periodistas coinciden en que el principal motivo de la caída de las izquierdas ha sido por la mala fama de estos partidos a raíz de la ley de amnistía y su trato con los partidos independentistas. Además, la realidad gallega complica la vida al PSOE, que nunca ha tenido un proyecto serio en esa comunidad según algunos medios de comunicación.
En cualquier caso, parece que el día a día de Pedro Sánchez con los independentistas catalanes está teniendo sus primeros efectos en las elecciones autonómicas gallegas. Quedan dos por delante este año: las vascas y las europeas. Será ahí donde el PSOE tendrá que cambiar un poco su cara.