El expresidente de Bolivia Evo Morales anticipó que quiere volver al poder en 2025. Aumenta la tensión en el país sudamericano.
La tensión en Bolivia empieza a crecer lentamente de cara a las elecciones presidenciales de 2025. Es cierto que falta todavía bastante para los comicios, pero la política en este país sudamericano se mueve bastante rápido, generando climas conflictivos que suelen asustar a la población, con antecedentes que no se pueden ni deben soslayar. En esta ocasión, el hombre que vuelve a aparecer en escena es un viejo conocido, muy querido por algunos y muy odiado por otros: Evo Morales, quien no pasa desapercibido para nadie.
Sí, el histórico dirigente Evo Morales quiere volver a la presidencia, cargo que supo ocupar desde enero de 2006 hasta noviembre de 2019, cuando tuvo que dimitir por una violenta crisis política. La pregunta que se están haciendo ahora en Bolivia es si Evo está habilitado para volver a ejercer el cargo. Evo, por las dudas, ya anticipó su postura con duras declaraciones, avisando que habrá “convulsión” si no lo habilitan. Una frase que asusta.
Evo, pasado, presente y ¿futuro? de Bolivia
Las nuevas advertencias de Evo Morales movieron rápidamente las aguas en este país latinoamericano. Integrantes del oficialismo y de la oposición tomaron esas declaraciones como una amenaza. El propio Evo responsabilizó al Gobierno de Luis Arce por esta posible inhabilitación. Lo curioso es que el propio Arce pertenece al mismo partido que Morales, el Movimiento al Socialismo, conocido simplemente como MAS. Ambos disputan también el liderazgo de dicho partido.
La gran interna que se vive en estos momentos en Bolivia tiene que ver con lo que sucede en el Movimiento al Socialismo de puertas hacia dentro, una organización que cumple 29 años de existencia y tendrá dos festejos para celebrar el aniversario, un síntoma que enciende más alarmas de las que ya estaban encendidas. En La Paz, festejará el bloque de Arce, mientras que en el departamento de Santa Cruz lo hará el bloque más cercano a Morales.
Evo, en su larga carrera política, ya se presentó cinco veces como candidato a presidente. La primera fue en 2002, consiguiendo el 20,94% de los votos en la primera vuelta, resultado que no le alcanzó para ser elegido como mandamás. Luego, se presentó en 2005, ganando las elecciones con el 53,72% de los votos. En las elecciones de 2009, volvió a ganar con el 64,22%. En 2014, obtuvo un nuevo triunfo con el 61,36% (siempre en primera vuelta) y en 2019, a pesar de ganar con el 47,08%, el sufragio terminó siendo anulado.